“La última y nos vamos…”
“…no me van a doblar y seguiremos ejerciendo la libertad de expresión al costo que sea.”
-Carlos Loret de Mola, periodista mexicano.
En el mundo al revés, todo es contrario a lo que la lógica y la razón deberían obedecer, un espacio donde la locura y la sinrazón convergen para crear toda clase de posibilidades desprovistas de orden. El 27 de febrero pasado, el periodista Carlos Loret de Mola compareció ante tribunales de la Ciudad de México atendiendo a una demanda interpuesta por el hermano del presidente, Pío López Obrador; así es, el mismo que vimos en videos recibiendo cuantiosas sumas de dinero en sobres amarillos, alegando que eran “aportaciones voluntarias” que el pueblo bueno y sabio realizaba para la causa obradorista.
Este acto no deja lugar a dudas sobre las vendettas personales del presidente con todo aquel que lo ataque o por el que se sienta amenazado. Utilizará todo el aparato gubernamental a su alcance para mermar la voluntad de los que él considera sus adversarios. Una clara muestra de ello fue la acción emitida contra la periodista del NYT la semana pasada, de la cual ya hablamos en este espacio.
Filtra información personal, ataca, denosta y señala a las personas que no comparten su mal llamada “causa”. Ahora se deja ver de cuerpo entero con su imperialismo y prepotente ser "acalambrando" a Loret de Mola con una comparecencia ante los tribunales por medio de su hermano Pío. Una vez más, el "presidente más humanista" muestra que solo es un fascista de clóset.
Pero, ¿por qué este sistemático ataque a la prensa por parte del presidente? Eso solo responde a una razón, y es que a lo largo de las semanas desde que se anunciaron las precandidaturas a la presidencia del país, la candidata del régimen, Claudia “la calca” Sheinbaum, no logra despegar ni atraer más votantes que los que le puede traer la mermada imagen del Macuspano. El presidente está preocupado y por varias razones: primero, su candidata tiene la misma simpatía que ver crecer el pasto; en segundo lugar, Xóchitl Gálvez ha embestido de manera muy frontal su imagen y sin duda ha ganado popularidad, también ha cautivado la atención de propios y extraños. Y por último, le preocupa que sus nexos con el narcotráfico sean abiertamente expuestos por el gobierno estadounidense, poniendo en riesgo la libertad de sus hijos y sus colaboradores más allegados. No olvidemos que Estados Unidos es implacable a la hora de ajusticiar a los que se atreven a amenazar su estabilidad y la ideología de que son los salvadores del mundo.
En fin, los que ya sabíamos cómo es el presidente lo veníamos advirtiendo: es un diminuto ser con complejo Napoleónico que busca a toda costa ganar. No dejará de atacar y utilizar las instituciones para su beneficio y el de su familia.
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